Un artículo crítico y reflexivo sobre el boom de los egobloggers. Estoy de acuerdo con muchas de las afirmaciones que hace. Y las tomo como propósito para seguir en este blog. Y también como guía para lo que no se debe hacer. Os dejo dos de los fragmentos que más me han llamado la atención.
"Ya hemos comentado alguna vez las manías aceptadas de las egobloggers. Esas fotos en descampados, en las vías del tren, en el arcén de la autopista o mis preferidos, los campestres en plan que-revuelco-por-la-hierba-con-mi-modelito. Los aceptamos. O las poses imposibles, como el pelito detrás de la oreja, o con cara de estar calculando de cabeza la raíz cuadrada de 2435 dividida entre 467. Pero si falsean sus estilismos, si esa ropa no es realmente de su armario ni se pondrían ese estilismo ni para ir a la pasarela Cibeles (manía que tiene la gente de disfrazarse cada vez que va a un evento de moda!).
Por ejemplo, cuando vemos estilismos de egoblogs que parecen planeados únicamente para la foto, y no para una situación real. Vale, aceptamos una pequeña licencia artística a la hora de posar para la foto, pero mal empezamos si lo que nos gusta por moda real se convierte en un posado planificado. Porque hay algunos estilismos que no hay quien se los ponga para ir a clase ni a la facultad. Que no, que no somos Carrie Bradshaw y podemos ir así por la calle. Para ver estilismos imposibles, tenemos las revistas. Terminaremos agotando el modelo."
http://devilwearszara.vogue.es/2012/02/los-limites-de-la-realidad-egoblogger/
Completamente de acuerdo, yo me aficioné a esto de seguir algunos blogs y egoblogs hace más de un año y cada vez la cosa degenera más, de hecho, los únicos que sigo fielmente después de un año son aquellos que me muestran outfits reales y/o asequibles, para admirar lo que no me puedo comprar me leo la Vogue.
ResponderEliminarEnhorabuena por el blog,Sue, me gusta. Un bico.